Con Volvo planeando convertirse en un fabricante exclusivo de vehículos eléctricos para 2030 y expandir su rango de crossover, este último informe no debería sorprender. Dos fuentes informaron que el fabricante de automóviles sueco planea construir un nuevo crossover eléctrico en la fábrica de la compañía en Ridgeville, Carolina del Sur.
Según los informes, el nuevo modelo, con el nombre en código V546, tiene el tamaño para ubicarse entre los reemplazos de los modelos XC60 de 4,69 m y XC90 de 4,95 m.
El V546 se fabricará tanto en Estados Unidos como en China. La producción en China debe comenzar en finales de 2024 y representará el 60 por ciento de toda la producción mundial de este modelo. La planta de Ridgeville comenzará a producir el nuevo crossover a partir de 2025. Actualmente, Volvo espera fabricar un total de alrededor de 100,000 de este nuevo modelo por año.
No se sabe cómo se llamará el nuevo crossover, pero como todos los nuevos modelos de Volvo, tendrá un «nombre propio». El primer automóvil que se beneficiará de esta estrategia es el reemplazo del XC90, que según los registros e informes de marcas registradas podría tener la insignia Embla.
El estilo del V546, como el reemplazo del XC90, se basará en el 2021 Concept Recharge.
Este último informe se combina con la información que ha estado filtrando el fabricante de automóviles sueco últimamente.
El mes pasado, Hakan Samuelsson, el director ejecutivo saliente de Volvo, confirmó que el fabricante de automóviles está comprometido con la fabricación de modelos sedán y familiar basados en su plataforma de automóviles de próxima generación, aunque habrá menos ofertas de estos estilos de carrocería tradicionales que en la actualidad.
Samuelsson también señaló que la compañía planea expandir su gama de crossovers.
Todo esto tiene sentido dada la disminución de la popularidad de los sedanes y las camionetas, y el impulso aparentemente imparable de los crossovers.