El SUV eléctrico insignia de Volvo debutará el 9 de noviembre y se llamará EX90, confirmó el CEO Jim Rowan el miércoles en una presentación ante los medios.
Redoblando su reputación de seguridad, Volvo también afirma que el EX90 será su modelo más seguro hasta el momento, gracias en gran parte a los sensores y software de última generación que pueden reducir los choques que resultan en lesiones graves o la muerte en un 20 %.
Volvo dijo el año pasado que el SUV eléctrico entonces sin nombre tendría lidar y software y procesamiento de siguiente nivel. Se espera que el conjunto de sensores del EX90 incluya un sensor lidar montado en el techo, ocho cámaras, cinco sensores de radar y 16 sensores ultrasónicos para habilitar varias funciones de asistencia al conductor. Eso incluirá una asistencia de conducción en carretera con manos libres denominada Ride Pilot.
Una de las nuevas tecnologías que se lanzarán en el EX90 será un monitor avanzado de distracción del conductor que utiliza algoritmos desarrollados internamente para medir la concentración a través de la mirada. Esto podrá detectar distracciones, cansancio u otras formas de falta de atención «más allá de lo que ha sido posible en un automóvil Volvo hasta la fecha», dijo el fabricante de automóviles.
Se espera que Volvo venda tanto el EX90 como un XC90 de próxima generación, un modelo que actualmente se vende con motores de gasolina e híbridos enchufables. El XC90 de próxima generación utilizará una nueva plataforma denominada SPA2, pero se espera que el EX90 obtenga su propia plataforma de skate.
La planta de Carolina del Sur donde se fabricará la EX90 estará lista para alternar entre la XC90 híbrida y este modelo completamente eléctrico. La misma planta también fabricará el SUV eléctrico Polestar 3 para la marca derivada de Volvo. Volvo ha dicho que hará que esta planta sea completamente eléctrica antes que otras, incluso las de China.
